La sonrisa como vía de salud: Nunca te tomes demasiado en serio.


Nuestro cuerpo, es una máquina que responde a las emociones. Cuando algo te hace sentir mal, habrás notado que es casi inmediato que la columna se encorva, los hombros pesan y el semblante del rostro se transforma. Claro ¡estás triste!, y si bien la tristeza no es una emoción "mala", si le permitimos ser quién dicte el estado general del cuerpo, entonces sí que se convierte en algo dañino para él.
Seguramente habrás escuchado muchas veces decir: "no estés triste", y quien se encuentra en este estado se pregunta interiormente o responde: "y eso como se hace".
Antes que nada, debemos reconocer cuando se trata de una tristeza, un desánimo, una distimia o una depresión.
La "técnica" del "no estés triste", se puede aplicar en las dos primeras, no así en las dos siguientes (distimia, depresión) estás requieren de un acompañamiento profesional más profundo y en el caso de la depresión, incluso de medicamento.

Sin embargo, para la tristeza y el desánimo, la herramienta de la sonrisa forzada, puede, de a poco, transformar la emoción.

Muchas veces hemos leído o escuchado críticas sobre la gente que en redes sociales "aparenta" ser una persona "feliz", pero que en su vida diaria (quizá) no lo es. Pero un hábito repetido se hace una norma.

No te tomes demasiado en serio.

Cuando sientas que te ha dado un bajón emocional, sonríe. ¿Qué no tienes ganas?, ¡no importa!, tú sonríe. Obliga a tus labios a estirase con una enorme sonrisa (hasta donde topen tus comisuras), es posible que sientas que estás haciendo el ridículo, pero no importa, sigue sonriendo, si quieres avanzar un poco más, lleva tu sonrisa hasta mostrar tus dientes. ¡Verás qué cambio! En poco momento tu cuerpo sonreirá contigo, quizá hasta te salga una carcajada.

Posiblemente al cabo de un rato vuelva tu desánimo, pero ya le habrás mandado el mensaje a tu cuerpo de que no es tu intención permanecer ahí por mucho tiempo, así que vuele a sonreír.

No importa si lo sientes o no, no importa si estás consciente que es finges. Estás jugando a sentirte bien, y con la práctica serás experto/a en el arte de sacarte de momentos de bajón.
No te tomes en serio a tiempo, para que no llegues a una depresión, con la cual tu cuerpo se verá afectado.

Así que ¡práctica ahora!

 

Entradas populares